Detrás de las tapas de Divididos (Parte 4)

Hoy: Vengo del placard de otro, Vivo acá, Canciones de cuna al palo y Vianda de ayer.

Vengo del placard de otro (2002)



Ni un ropero, ni una puerta, ni un dormitorio. Con un criterio más incomprensible que nunca, la imagen de la tapa es una enorme morcilla sobre fondo blanco que se asoma desde la izquierda, abriéndose en dos elementos tipográficos (nombre de la banda y título del disco). La caja, de cartón es bastante extraña, su apertura hacia arriba, abajo y los laterales resulta un poco incómoda, pero la gráfica es impecable. El librito con las letras, de diseño pulcro y concreto, presenta en sus hojas unas pequeñas manchas de grasa que respaldan el concepto vertido en la tapa, como si hubiésemos estado manoseando el embutido de la tapa antes de relojear el librito.

Viva acá (2003)



El disco de versiones en vivo presenta una dualidad de fácil apreciación. Un disco acústico y otro más agitado representado por una cabellera mitad peinada, mitad despeinada. La imagen se asoma desde la parte inferior sobre un fondo celeste y blanco. El tratamiento tipográfico, de apariencia manuscrita, hace referencia directa a la gestualidad de los papeles que andan por ahí en un show en vivo (lista de temas, acotaciones técnicas, tachones varios). Una foto panorámica en el interior muestra a los músicos tocando relajados. El disco contiene cuatro calcos y un postercito con la estética general del disco.

Canciones de cuna al palo y Vianda de ayer (2004)



Nuevos compilados que engordan la discografía del trío. Dos álbumes diferentes que encaran la obra de Divididos desde puntos de vista diferentes, reflejados con cordura desde sus tapas.

Canciones de cuna al palo se presenta con un primer plano de un bebé con gesto de sorpresa, con su nariz adornada por un piercing. Una alusión demasiado obvia para lo que acostumbran a exponer en tapas.

Vianda de ayer muestra una composición centrada que consiste en un montaje (bastante flojo) donde se ve a los músicos sentados en un sillón sobre el césped, y un plato con una manzana en primer plano. Una tapa sin mucha búsqueda conceptual.

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